He vuelto para contaros la mayor tragedia vivida desde que he llegado a Milán: españoles, las clases han comenzado. Así que toca ponerse serio.
Después de tres semanas de curso el papeleo se amontona y los formularios a rellenar se me empiezan a mezclar con hojas para calcular el número de créditos, hacer las cuentas del primer mes y todas esas cosas que creí que nunca llegarían. Y esta es la pinta que tiene mi escritorio:
Jornadas de presentación para todos los Erasmus y las primeras clases con los nervios normales. Cuando esté más establecida os informaré de las asignaturas que me van a perseguir durante estos meses.
De momento poco más, amici. A nivel personal, informar de que POR FIN hemos conseguido un frigorífico para la habitación y estas eran las caras de felicidad de mi compi y mía:
Baci a tutti!
P.D. Mami, no te preocupes, que normalmente el escritorio o tengo así de limpito. ¡Muuá!
Me encantas tanto :) jijijiji
ResponderEliminarQuién es el MACHOTE gabacho ese que está contigo?!?! AY OMÁ QUE ME LO COMO. VAYA PEDAZO DE P..P.... PELAMBRERA BONITA QUE TIENE POR BARBA OYE. Sabe ya el Javié que andas enrollao con el de la foto?
ResponderEliminarEnga shula, un besazo
Cheers de tu corebro.
Ese quién es? Aléhateeeeee primo aléhate!
EliminarFrancamente, si tenéis pensado hacer un viaje no os comáis tanto el tarro e id para Milán. Si habéis visto ya las otras entradas, fotos y os gusta la vida ravioli, los motivos sobran. Hay vida más allá de la ciudad de los bolsos de prada, en serio.
...Y si no os gusta la ciudad siempre os podéis hinchar a comer.
Arrivederci
tia... tu blog es adictivo ^^
ResponderEliminar